Los DAF en la era de la IA: convertirse en expertos en procesos para garantizar el éxito a largo plazo
La Inteligencia Artificial (IA) está redefiniendo el panorama empresarial, y su adopción por parte de los Directores Administrativos y Financieros (DAF) no solo se está convirtiendo en una necesidad, sino también en una fuente clave de transformación estratégica. Mientras la IA sigue captando la atención, la capacidad de los DAF para dominar esta tecnología y aprovechar sus beneficios estratégicos y financieros a largo plazo es crucial. En este artículo, exploraremos cómo los DAF pueden posicionarse como los arquitectos del éxito de su organización, convirtiéndose no solo en guardianes de las finanzas, sino también en verdaderos estrategas y expertos en IA.
La IA: una palanca esencial para los DAF en la transformación organizacional
Estamos viviendo una época en la que las expectativas sobre la IA están en su punto más alto. El estudio internacional realizado por OneStream, junto con la encuesta anual de PwC y la DFCG en Francia, muestra claramente que los DAF están integrando cada vez más la IA entre sus prioridades. Estos directivos ven en la IA una oportunidad sin precedentes para mejorar el procesamiento de datos, automatizar procesos, tomar decisiones informadas y gestionar los riesgos de manera proactiva.
Las cifras hablan por sí solas: según el estudio de PwC, la productividad ha experimentado un crecimiento casi cinco veces más rápido en los sectores donde la exposición a la IA es más alta. Esto subraya la importancia de la adopción de la IA para las empresas que no solo buscan mantenerse al día con la competencia, sino también superarla. Para los DAF, esto significa que deben dominar rápidamente esta tecnología y comprender sus implicaciones para toda la organización.
El papel estratégico del DAF en la adopción de la IA
Mientras que el 60% de los CEO están impulsando una rápida adopción de la IA, surge la pregunta: ¿quiénes serán los verdaderos ganadores y perdedores en este panorama dominado por la IA? Las organizaciones que logren vincular las ganancias de productividad con una innovación continua y una mayor rentabilidad desde las primeras fases se mantendrán a la cabeza de la competencia. Los DAF, con su profundo conocimiento del funcionamiento empresarial, están en una posición ideal para guiar a su organización en la explotación del potencial de la IA para transformar las operaciones y mejorar los resultados.
Para lograrlo, los DAF deben superar su rol tradicional de guardianes de las finanzas y adoptar un papel más amplio como expertos en procesos. En las empresas en fase de arranque, donde el DAF a menudo también actúa como director de operaciones (COO), esta doble competencia se vuelve aún más crucial. En un entorno dominado por soluciones SaaS, donde las operaciones informáticas tradicionales han perdido su papel de guardianes del flujo tecnológico, es esencial que los DAF comprendan la automatización y la integración de procesos. Esto les permite conectar las soluciones dispersas dentro de la empresa, evitando ineficiencias que podrían comprometer la efectividad de las iniciativas de IA a largo plazo.
La necesidad de comprender la IA más allá del bombo mediático
Con el entusiasmo actual en torno a la IA, los DAF y otros responsables presupuestarios influyentes deben tener una comprensión profunda de las capacidades reales de la IA. No basta con seguir la tendencia; es crucial definir los resultados organizacionales prioritarios que cualquier iniciativa de IA debe perseguir para aportar un valor real y medible a la empresa. Por ejemplo, un DAF está bien posicionado para definir cómo podría ser el éxito de la IA para el equipo financiero o cómo la IA puede ayudar a mejorar la eficiencia en áreas de la empresa listas para la optimización.
Tomemos el ejemplo de Nintex, una empresa que ha enfatizado el uso de la IA para estructurar de manera efectiva los datos no estructurados. Con herramientas de IA, ahora es posible analizar la estructura de implementación en la nube, proporcionar información sobre los gastos y detectar ineficiencias. Sin embargo, este nivel de comprensión del funcionamiento de la empresa solo puede ocurrir si el DAF domina los procesos y los flujos de trabajo internos. Para que la IA cumpla sus promesas, el papel del DAF puede ser un elemento crucial en esta transformación organizacional.
La automatización y la calidad de los datos: los pilares del éxito de la IA
La automatización y la mejora de la calidad de los datos son áreas donde la IA ya está mostrando resultados tangibles. Según el estudio de OneStream, las empresas que ya utilizan IA citan como principales beneficios la corrección (69%), la limpieza (60%) y el mapeo (59%) de los datos. Estos procesos, tradicionalmente largos, ahora se optimizan con IA, lo que permite a los equipos financieros concentrarse en tareas de mayor valor agregado.
La automatización de tareas repetitivas también es una prioridad para los DAF franceses, según la encuesta PwC-DFCG. Una abrumadora mayoría (77%) de los encuestados considera que la automatización a través de la RPA (Robotic Process Automation) es un factor clave para ganar en eficiencia. Por ejemplo, la automatización de conciliaciones bancarias o los procesos de cierre contable no solo reduce errores, sino que también acelera considerablemente estas tareas. Otro ejemplo concreto es el uso de la IA para analizar grandes cantidades de datos financieros, lo que permite identificar tendencias de mercado o anomalías financieras, reforzando la capacidad de los DAF para anticiparse y reaccionar rápidamente.
La IA generativa: una revolución en curso para los DAF
La IA generativa, en particular, se está revelando como un activo importante para los DAF. No solo ayuda a sintetizar y enriquecer información compleja, sino que también es capaz de extraer datos esenciales de documentos financieros. Por ejemplo, una IA puede analizar contratos para identificar cláusulas específicas, riesgos potenciales o discrepancias con los estándares de la empresa. También facilita la comparación de diferentes contratos, lo cual es crucial al negociar nuevos acuerdos.
Además, la IA, en su forma actual, es extremadamente beneficiosa para proporcionar una visión más clara del rendimiento financiero de una organización a través de la normalización y limpieza de datos. Esta capacidad para transformar datos no estructurados en información procesable permite a los DAF disponer de un panel financiero más preciso y transparente. Sin embargo, esto solo es posible si el DAF se asegura de que los procesos de recopilación y gestión de datos estén optimizados.
El impacto en los recursos humanos: ¿oportunidad o amenaza?
La creciente integración de la IA en los servicios financieros genera reacciones mixtas en lo que respecta a los recursos humanos. Según el estudio de OneStream, el 46% de los encuestados ve la IA como una amenaza para los empleos en finanzas, temiendo que la automatización reemplace algunas funciones tradicionales. Sin embargo, una mayoría (72%) piensa que la IA abrirá nuevas oportunidades, liberando tiempo para que los equipos se concentren en tareas más estratégicas y creativas.
Un ejemplo ilustrativo es la evolución del rol de los analistas financieros. En lugar de dedicar tiempo a tareas de ingreso de datos o conciliación de cuentas, los analistas ahora pueden centrarse en el análisis de escenarios complejos, la elaboración de estrategias financieras o la gestión de riesgos. Esta evolución de las habilidades podría transformar la función financiera, haciéndola más proactiva y orientada a la toma de decisiones estratégicas.
Conclusión: la evolución del rol de los DAF en un panorama dominado por la IA
El rol del DAF está evolucionando rápidamente con la aparición de la IA. Aquellos que adopten este cambio, convirtiéndose no solo en gestores financieros, sino también en expertos en procesos y estrategas de IA, desempeñarán un papel clave en el éxito de su organización. Al centrarse en la optimización de procesos, la calidad de los datos y la integración efectiva de la IA en sus operaciones, los DAF pueden aprovechar todo el potencial de la IA para transformar la organización y asegurar una ventaja competitiva duradera.
Los verdaderos ganadores en este panorama dominado por la IA serán aquellos que logren integrar eficazmente la IA en sus operaciones, manteniendo un enfoque en la innovación a largo plazo y la rentabilidad. El DAF, como arquitecto del éxito de la IA, se posiciona en el centro de esta transformación, listo para guiar a su organización hacia un futuro donde la IA no solo será una herramienta, sino un factor clave de diferenciación estratégica. La pregunta es: ¿está su DAF listo para aprovechar esta oportunidad y convertirse en el pilar del futuro digital de su empresa?